sábado, 27 de septiembre de 2014

Lectura 5


ROHIPNOL
LA DROGA DE LA VIOLACION
Se pone a escondidas en las bebidas para provocar amnesia a las mujeres y abusar de ellas.

Eso que tomo Jennifer --- digo ---, yo no lo puse en su bebida.
---  Pues alguien lo hizo --- contesta el doctor.
--- ¿Y cómo vamos a saber quiénAdemás ¿Por qué Jennifer es la única afectada? ¡Todos bebimos lo mismo!
--- Ella, además de alcohol, tomo GHB en grandes cantidades. Quizá otra persona el dio la droga, pero de igual forma pueden hacerte responsable…
--- Ya entendimos --- dice papá saliendo en mi defensa ---, mi hijo y yo investigaremos que paso y daremos la cara. Por lo pronto, doctor, le suplico que atienda bien a Jennifer.
--- Así lo hare --- se despide ---. Con su permiso.
Mi tía Beky comienza a sollozar. Ella es directora de la “Junta de asistencia privada”. Todas las niñas del orfanato están bajo su responsabilidad. Si algo le pasa a Jennifer, muchas cosas van a cambiar.
Mi tía en círculos. Mama la sigue para abrazarla. Papá toma asiento y se tapa la cara con ambas manos.
Me quedo clavado en el suelo. Mi prima me mira con tristeza como indicándome que confía en mí. Después pregunta:
--- Felipe. ¿Además de tus compañeros no viste si alguien más saludo a Jennifer?
--- ¡Sí! --- me exalto ---. El portero. La llamo por su nombre. Le dijo “preciosa”. Avanzamos entre la gente para  entrar y después el… le miro el trasero… con morbo. Me sentí incómodo.
--- ¿Y durante la tarde, ese tipo no volvió a buscarla?
--- Estuvo en la barra de bebidas. Cuando Jennifer se puso enferma, él nos llevó hasta afuera, pero luego desapareció.
--- ¡El la drogo! --- dice Itzel ---. ¡Tío Owin!, tenemos que regresar.
Papá, que había escuchado nuestra conversación, se pone de pie como movido por un resorte.
Mamá permanece en el hospital con mi tía Beky. Papá, Itzel y yo vamos de vuelta al antro.
Cuando llegamos, nos asombra ver tanta gente en el pasillo.
Los muchachos de la tardeada se están yendo, mientras los mayores de edad vienen llegando. Todos parecen alegres y despreocupados, como si nada mal hubiese pasado ahí. Se ha vuelto a formar la aglomeración.
--- ¡Somos dos! --- gritan unos.
--- Déjanos pasar --- vociferan otros.
--- ¡Estamos aquí desde hace rato!
El portero tiene aspecto moderno. Lo señalo.
--- Él es.
Papá quiere acercarse, pero la gente se lo impide. Entonces da la vuelta y va directo al acceso principal. Un guardia lo detiene.
--- ¡Quiero hablar con el gerente! --- dice mi padre.
--- ¿Qué se le ofrece?
--- Hace rato drogaron a una jovencita en este lugar. Se está muriendo. Necesito investigar que paso.
El vigilante llama por su radio.
A los pocos minutos sale un sujeto calvo de abdomen abultado.
--- ¿En qué puedo servirle?
Papá explica todo con voz fuerte y alterada. El gerente responde sin inmutarse.
--- Aquí no se consumen drogas. Es un sitio sano. Puede pasar a ver. Los jóvenes se divierten cada fin de semana y jamás ocurren cosas como la que usted menciona.
--- La niña de la que le hablo --- objeta mi padre ---, tuvo un infarto cerebral porque aquí, alguien le puso GHB a su bebida. El medico nos lo explico. Además, sus meseros les dieron tequila a los muchachos.
--- Está equivocado, señor. En las tardeadas solo servimos refrescos. Si la joven tomo droga o alcohol, ella o sus amigos la traían. A veces meten botellitas de perfume con líquidos que no son perfume. Haga la investigación en otro lado.
Pregúntele al joven que venía con ella.
Papá responde de inmediato:
--- Mi hijo es quien invito a esa chica a este lugar; él es testigo de que les dieron bebidasalcohólicas. De seguro, alguno de los vasos también contenía droga. Queremos hablar con el tipo de la puerta. Tenemos motivos para sospechar de él.
--- Mis empleados son honorables.
--- ¿Esta seguro?
El gerente le dice al auxiliar que vaya por su compañero.
El portero llega. Mira a Itzel de arriba abajo, como si estuviese coqueteándole. Mi prima lo encara con furia.
--- ¿Para que soy bueno? --- pregunta después.
--- ¿Conoces a la joven que se puso enferma hace rato?--- pregunta el gerente.
--- No.
--- ¡Le hablaste por su nombre! --- digo ---, en cuanto llego, la saludaste. Es tu amiga. Nos estuviste mandando bebidas a la mesa y ella acabo drogada. Se está muriendo por  culpa.
--- ¿Qué dices, estúpido? ¿Cómo te atreves a acusarme?
--- ¡Calma! --- exige el gerente.
--- ¡Vea lo que está diciendo este imbécil! Me quiere hacer responsable de algo que el hizo. ¡Tú drogaste a la niña! ¡Y no solo eso! La manoseaste. Le abriste los botones su vestido y le quitaste el piercing que traía en el ombligo. Lo vi.
--- Ella se desabotono --- trato de defenderme ---, me dio su alfiler. Yo no hice nada.
--- ¿Ahora resulta que eres inocente de todo? Pero bien que estuviste besándola y abrazándola como loco. ¿ o no?
--- Eso fue po… po… --- tartamudeo otra vez ---, porque se comportaba de forma mu… mu… muy extraña.
--- ¡Tu querías abusar de ella! Cuando fuiste al baño me pediste Roll and fall. Te dije queaquí no usábamos drogas, mucho menos Rofy.
--- Estas mi… mintiendo… Yo un… nunca hable contigo.
--- ¡Luego cuando ella se desmayó, la dejaste tirada en el suelo y quisiste huir!, pero encontraste a los paramédico y tuviste que regresar. ¡Reconócelo!
El gerente interviene:
--- Ahora se ve todo más claro. Lamento lo sucedido, señor, pero le recomiendo que platique con su hijo. Nadie puede darle mejor información que él.
--- Llegare al fondo del asunto --- responde papá ---, si mi hijo es culpable, lo pagara, pero si no lo es, arremeteré contra usted y su negocio.
El gerente sonríe, vuelve a rascarse el oído para sacarse la cerilla y da la vuelta dejando a mi papá enrojecido de coraje.
El portero truena sus labios mandándole un beso a mi prima. Ella se adelanta como dispuesta a darle una bofetada.
--- Infeliz --- murmura Itzel ---. Te vas a acordar de mi.
--- ¿Mas? Me acuerdo de ti a diario. Mejor no le muevas.
El portero se aleja. Ella se queda trabada. Yo no alcanzo a entender lo que acaba de suceder.
--- Hola, Felipe --- me estremezo; es la vos del director de la preparatoria. Está detrás de nosotros. Volteamos ---. Tus compañeros me acaban de avisar lo que paso. ¿Dónde se encuentra Jennifer?
--- E… en el hospital, director.
Mi padre lo saluda.
--- Estamos muy consternados.
--- Sí. Escuche la conversación. Felipe, ¿tú no le pusiste nada a la bebida de Jennifer?
--- ¡Ya lo he dicho muchas veces! ¡No lo hice!
El director suspira.
--- Oí que te acusaron por tratar de conseguir Rool and fall.
--- ¿Qué es eso? --- pregunta mi prima con timidez.
--- Rohipnol. Una medicina súper potente, de la familia de las benzodiacepinas. Se la dan a pacientes moribundos o con dolores muy graves, para sedarlos.
--- ¿Y también se usa como droga? --- pregunta mi padre.
--- Sí. Es la calle le dicen Rofy, Roche, Rofenol, Roll and fall y la Forget me pill. El primer efecto del Rohipnol es parecido al del alcohol. Tomar una pastilla equivale a beber seis latas de cerveza. Produce ebriedad instantánea, nauseas, mareo, desorientación, y sueño. Lo más importante del Rohipnol es que en los antros y fiestas se ha puesto de moda para drogar a las mujeres. Incluso por causa del Rohipnol en algunos países has salido nuevas leyes que penalizan el abuso sexual facilitado por drogas. Al Rohipnol le llaman la droga del “date rape” o “cita para violar”. Igual que el GHB se pone en las bebidas, sin que la persona se dé cuenta; también hay presentación liquida; como no tiene sabor, color ni olor, la bebida parece exactamente igual. El Rohipnol produce amnesia anterógrada.
--- ¿Ante… que? --- pregunto a medias, sin comprender.
--- Existen dos tipos de amnesia. La retrograda, cuando la persona olvida todo lo que le sucedió antes de un accidente y la anterógrada, cuando olvida todo lo que sucedió después. Imagina que tomas Rohipnol en tu refresco “por accidente”. No recordaras nada en absoluto de lo que te ocurra a partir de ese momento, aun cuando permanezcas despierto. La mujer, una vez que toma la droga, comienza a sentirse cansada y borracha. Es llevada a otro sitio donde el hombre que la drogo puede abusar de ella. Es común que sea desnudada y violada, incluso entre varios sujetos; luego es vestida de nuevo y dejada, dormida, en una cama. Al despertar no se acuerda de nada. También los hombres pueden ser víctimas de abusos y asaltos, aunque sean musculosos, se pones débiles como bebes cuando consumen esta droga. En altas dosis o mezclado con otras sustancias,  Rohipnol puede producir paro respiratorio y coma.
Volteo a ver a mi padre. Esta pálido.
Itzel tiene la boca abierta.
Yo no puedo creer lo que sucede.
¿Acaso los jóvenes ya no podremos ir a fiestas o antros?
Muevo la cabeza. Esa no sería la solución, nada va a quitarnos el placer de bailar y convivir. Pero, con esta modalidad de drogas, ¿ahora será necesario pedirle a los meseros que destapen los refrescos enfrente de nosotros, beberlos de inmediato, o cargar con el vaso a todos lados? ¿Y, al volver a la mesa después de bailar, ya no podremos tomar la bebida que quedo sin supervisión?
¡Esto es una locura!
Lo más extraño, después de enterarme que existen esas sustancias, es el hecho de que se hallen cerca, sean tan comunes y estén afectando mi vida de forma directa.
Papá le da al director los datos del hospital en el que esta Jennifer y acuerda encontrarse con el allá. Intercambian sus números telefónicos y nos despedimos.
Camino al estacionamiento, estoy a punto de tropezar varias veces porque tengo la vista nublada por las lágrimas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario