jueves, 30 de enero de 2014

LECTURA 14

LA PLANCHADA; QRO


En algún momento de nuestra vida alguno de nosotros ha estado internado o de visita en algún hospital, desde el momento de ingresar comenzamos a percibir vibras extrañas, nuestros ojos registran los rostros angustiados de los familiares, el intenso sonido de la sirena de la ambulancia, el ambiente es un vaivén desesperado de  médicos, todo es un cuadro  de melancolía, miedo y desesperación.




El saber que el paciente de la cama vecina ha dejado de existir, es en alguna forma un encuentro con la muerte, una experiencia única, en una cama un ser luchando por su salud, en la otra un cadáver, así de extrema es la vida dentro de los hospitales.
En estos muros también se guardan historias extrañas, espeluznantes, que oscilan entre el mundo de los muertos y los vivos. Una de esas historias es La Planchada.
Querétaro, les presenta su leyenda.
Cuenta la leyenda que existió una bella enfermera en los años 50´s, que estuvo profundamente enamorada de uno de los médicos del hospital donde ella trabajaba, él era bien parecido, fino en su trato, se dice que tanto como en su persona y su vestimenta siempre estaba impecable. 
Este galeno se llamaba Joaquín,  tenía una mente brillante, recién se había graduado con honores, esto lo hacía un tanto vanidoso y en muchas ocasiones insensible. Desde que llegó, el director de la institución  mostró su respeto y lo presentó ante sus compañeros (acto que jamás había hecho), sin embargo ese día la enfermera Silvia no fue a la presentación por estar atendiendo un paciente.
Silvia era conocida por ser entregada en su trabajo, responsable y cálida con los enfermos, siempre tratándolos con cariño, brindándoles palabras de aliento.

Con el paso del tiempo Silvia y Joaquín se conocieron a través, desde que se vieron ambos se gustaron, así que pronto comenzaron a salir, hasta que Silvia quedó totalmente enamorada.
Los meses pasaron y ella cada día se ilusionaba más, su trabajo lo desempeñaba de manera casi perfecta. Un día su felicidad creció, cuando Joaquín le propuso matrimonio, un acto cruel, pues era un hombre comprometido en otra ciudad.
Sabiendo que pronto se marcharía a otro hospital, Joaquín decidió terminar con la relación, era en un mes de octubre cuando le confesó que la había engañado, Silvia pensó que su mundo se derrumbaba ante esta declaración, se sintió burlada, una inmensa melancolía invadió su cuerpo, su rostro comenzó a desfigurarse, sus sentimientos nobles se transformaron en odio.
Las últimas palabras de Silvia para Joaquín fueron: “Te maldigo para siempre, jamás serás feliz, vivirás con la eterna culpa que yo te provocaré, te odio, te atormentaré en esta vida y aun después de muertos”
Al día siguiente, Joaquín ya no se presentó; por su parte Silvia, llegó siendo otra persona, su uniforme en perfecto estado, su cofia tenía una blancura asombrosa, sin embargo su rostro estaba demacrado, ojeroso, sus ojos totalmente rojos, su cabello largo apenas recogido, su mirada era fija, sin parpadear, la boca entre abierta, no contestó ningún saludo, de inmediato el Director del Hospital fue notificado de la situación, éste corrió en busca de Silvia, uno de los enfermeros dijo haberla visto rumbo a terapia intensiva, al llegar ahí la buscaron desesperadamente, y fue entonces cuando otra enfermera gritó:
- Aquí esta Silvia
El director y otras enfermeras se dirigieron a uno de los baños de esa área y descubrieron el cuerpo inerte de Silvia. Se había ahorcado, su rostro dibujaba una sonrisa diabólica, sus ojos estaban totalmente abiertos, en una de sus muñecas se había cortado para escribir con su sangre TE ODIO.
Desde aquel día el hospital ya no fue el mismo, pacientes como personal médico y administrativo, comenzaron a ver una extraña figura fantasmal que deambula por los pasillos del hospital.

La hora de las apariciones comienza a las 23:00 hrs hora en que se suicidó la planchada, en un mes de octubre. Quienes la han visto aseguran que no camina, sino que flota, y si alguien intenta seguirla, la persona no vive para contarlo. Por su parte los enfermos terminales son visitados también por la planchada, a ciencia cierta no se sabe si para acabar con sus vidas o para ayudarlas.
La leyenda también asegura que Joaquín al terminar su boda, salió con su recién  esposa rumbo a su luna de miel, a bordo de un auto de lujo, pero en la carretera, sufrió un mortal accidente. Moribunda la recién casada, con su último aliento alcanzó a decir: “vimos una enfermera sobre la carretera, no sé quién era, pero ella provocó nuestra muerte”
Desde entonces se dice que en todos los hospitales La Planchada se aparece., si la ves no la sigas…


miércoles, 22 de enero de 2014

Lectura 13


EL CALLEJÓN DEL BESO

La ciudad de Guanajuato es considerada como uno de los lugares más románticos de México, por sus estrechas y empinadas callejuelas, sus numerosas iglesias y viejas casonas multicolores, y por sus historias de amor, la mayoría de ellas relacionadas con el afamado "Callejón del Beso".


Todo el que llega a Guanajuato, sobre todo si es en pareja, pregunta por este sitio tan singular, donde se han acuñado diversas leyendas, como la que habla del amor de Doña Carmen y Don Carlos, una de las más sorprendentes por su valor trágico y romántico.
Según los lugareños, Carmen era hija única de un padre intransigente y violento que la tenía casi aislada de la sociedad, a fin de evitar que le llegara el amor y la arrebatara de su lado.
No obstante, en algunas "escapadas", Carmen fue cortejada por Carlos, un humilde minero, con el que se veía en un templo cercano a su hogar.
Al ser descubierta tuvo que soportar el encierro al que la sometió su padre, bajo la amenaza de enviarla a un convento y casarla en España con un viejo y rico noble, con el que, además, acrecentaría el padre su mermada hacienda.
En aquella época, todas las doncellas tenían a su dama de compañía, así que la bella mujer acudió a ella para pedirle que le entregara una carta a Carlos en la que le revela el trágico suceso. Mil conjeturas se hizo el joven enamorado, pero de ellas hubo una que le pareció la más acertada.

Una ventana de la casa de Carmen daba hacia un angosto callejón, tan estrecho, que era posible, asomado a la ventana, tocar con la mano la pared de enfrente. Si lograba entrar a la casa frontera podría hablar con su amada, y entre los dos, encontrar una solución a su problema. Preguntó quién era el dueño de aquella casa y la adquirió a "precio de oro". Así, los enamorados tuvieron largas noches para consumar su amor hasta que un día el padre escuchó los murmullos y entró a la habitación de Carmen y encontró a la pareja reunida. Enfurecido y en gran acto de violencia, clavó una daga en el pecho de su hija. Ante la tragedia, Carlos enmudeció de espanto y dejó en sus manos, tersas y sin vida, un tierno beso.
El joven no pudo soportar vivir sin el amor de Carmen y desesperado se suicidó, tirándose desde el brocal del tiro principal de La Mina de la Valenciana. Sigue...
La leyenda se corona con una advertencia: La pareja que visite este sitio y se de un beso en el tercer escalón de este afluente angosto logrará su felicidad durante siete años, sin embargo, quien no lo haga y pise el lugar, tendrá siete años de mala suerte. Para las personas que no llevan pareja, no pesa ninguna maldición, pero sí se les recomienda que busquen pareja rápido y al encontrarla, no duden en visitar juntos este lugar situado en la bella ciudad de Guanajuato. "El Callejón del Beso" destaca por su estrechez, ya que sólo mide 68 centímetros de ancho. Su atractivo radica en que los balcones de las dos fincas de este callejón prácticamente se tocan.
Ubicado en las faldas del Cerro del Gallo, en un barrio cuya construcción data del siglo XVIII, la edificación de las casas que conforman el callejón son sencillas y en un estilo peculiar acorde a la topografía de Guanajuato.
Confluye a este Callejón el del Patrocinio, a cuyo término se levanta la puerta principal de la Ex-Hacienda del Patrocinio de Nuestra Señora de Guanajuato, la cual formó parte de un conjunto de haciendas que se extendieron a lo largo de la cañada del Real de Minas.
Bajando desde el oeste por la Avenida Juárez, uno de los primeros atractivos que salen al paso es el Mercado Hidalgo. Aunque un poco desordenado, alberga un sin fin de recuerdos y artesanías relativas a la ciudad, al igual que dulces y comidas típicas.
Continuando calle abajo, aparece la plaza del Ropero con una fuente en medio y pequeños y estrechos caminos que salen de ella. Una de esas veredas, la que da hacia el cerro, es la que lleva al famoso "Callejón del Beso", estrecho y oculto rincón donde caben justo dos personas. Sin duda, "El Callejón del Beso" es el lugar que por curiosidad o romanticismo se ha convertido en uno de los más visitados de esta ciudad. A la fecha, cientos de estudiantes, turistas y pueblerinos solicitan a los dueños actuales subir a las habitaciones para prometerse amor eterno.

miércoles, 15 de enero de 2014

Lectura 12


Generación  sin  Esperanza
Lectura 12


Interesado en tu futuro…. Por que sí estudiar  y/o trabajar.



No estudian y no trabajan. Son millones de jóvenes en todo el mundo que se encuentran en especie de limbo existencial y que, desafortunadamente, son presa fácil de la delincuencia organizada, el narcotráfico y la violencia.
Se cuentan por millones y están por todas partes; es muy probable que conozcas a alguno e, incluso, que tú seas uno de ellos. Son los Ninis (ni estudian, ni trabajan), tribus de jóvenes y adolescentes que pasan inadvertidos para un mundo globalizado que les niega la posibilidad de desarrollar sus capacidades físicas e intelectuales.
Pudiera pensarse, en primera instancia, que este fenómeno se observa solamente en las llamadas “naciones en vías de desarrollo”, como México, pero la verdad es que ocurre en todos lados. En España, por ejemplo, el Instituto de la Juventud local acepta que casi 600 mil chavos se encuentran en estas circunstancias. En Argentina las estadísticas oficiales muestran que 20% de los jóvenes de 14 a 24 años pertenece a este “club”, y lo peculiar es que, al consultarlos, declaran no querer hacer nada. De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas (ONU), 18% de los jóvenes uruguayos no estudia ni trabaja; porcentaje semejante se presenta en Brasil (19%) y Paraguay (21%). En el Caribe los adolescentes no se quedan atrás, ya que se estima que 20% tienen la etiqueta de Nini, mientras que en Centroamérica la situación es similar: 21% de la población de 16 a 29 años se inscribe en esta categoría.
Aunque hablamos ya de España, podemos decirte que si consideramos a Europa en su conjunto las cifras son verdaderamente alarmantes; sí, porque contrario a lo que pudiera pensarse, el porcentaje de jóvenes desempleados que “pasan el día en blanco” llega a 34%. Dicha cifra es sólo opacada por el índice registrado en África, donde 40% de los chicos están en el ocio completo.
México, un caso más desafortunadamente, México colecciona primeros lugares en temas como violencia, narcotráfico, corrupción e inmigración, así como en obesidad infantil y personas enfermas de diabetes (elevada concentración de azúcar en sangre por la incapacidad del organismo para aprovecharla).
En el caso del desempleo y la falta de oferta educativa dicha tendencia continúa. Los indicadores nos dicen que 7 millones de jóvenes pertenecen a la llamada Generación Nini; de ellos, 120 mil se encuentran en la capital de la República. Un dato complementario, ofrecido por la Secretaría de la Defensa Nacional, revela que en los últimos años 1,200 jóvenes han muerto en enfrentamientos suscitados entre los diversos grupos de narcotraficantes que existen en nuestra geografía.
Nelly Alarcón, encargada del área pedagógica de la dirección ejecutiva de tratamiento a menores del sistema penitenciario del Gobierno del Distrito Federal, explica que el entorno familiar donde se desarrollan los Ninis de México es de total abandono. Dicha falta de supervisión por parte de sus padres, dice la funcionaria, proviene de la necesidad de que ambos trabajen. Esta situación, aunada a la carencia de recursos para que los hijos puedan seguir su desarrollo escolar, promueve que haya gran ociosidad. “De allí a la delincuencia sólo hay un paso”, concluye la entrevistada.
Por su parte, el Dr. José Narro Robles, rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), ha subrayado la falta de oportunidades para los jóvenes mexicanos y el riesgo que esto implica, toda vez que muchos chicos creen que involucrarse con las organizaciones criminales es una manera de trascender socialmente. “Si seguimos confundiendo lo que es el éxito para una persona, si queremos pensar que alguien exitoso es aquel que en menos tiempo hace más dinero, estamos equivocándonos, y eso tiene que ver con el crimen organizado y con la búsqueda de salidas falsas que no llevan a ninguna parte”, ha dicho el máximo representante de la UNAM.
El Mtro. Sabino Bastidas Colinas, prestigiado analista mexicano especializado en política, leyes y administración pública, establece que la Generación Nini es problema muy grave, sobre todo porque la mayoría de los chicos que se encuentran sin trabajo y sin posibilidad de estudiar buscan alguna actividad productiva que les permita desarrollar sus habilidades, pero no la encuentran.

“Los Ninis viven en condición social de verdadera marginación, discriminación y exclusión social; son chicos que están obligados a mantener situación forzada de ocio frustrante, obligatorio, impuesto, incómodo, improductivo y, por supuesto, angustiante y doloroso. Son jóvenes desocupados que buscan acomodo, que tratan de encontrar un lugar en la sociedad, que luchan para conseguirlo pero, sencillamente, no lo logran. Asimismo, están en busca de trabajos y universidades, que hacen filas, llenan formularios, acuden a entrevistas y exámenes, pero sólo reciben negativas”, enfatiza.
Es lamentable, dice el académico, que esta situación ocurra en una etapa muy delicada de la vida, precisamente en el inicio del desarrollo profesional, es decir, la fase donde se originan los primeros proyectos y se trabaja para cumplir los sueños que se han forjado. “En ese instante los Ninis están a la deriva, el camino se obstruye y no tienen ruta hacia ningún lugar cierto. Los chicos esperan una oportunidad, mientras sus padres comparten su angustia y ansiedad porque no saben qué decisión tomar”. Como consecuencia, señala Bastidas Colinas, el fenómeno influye en la autoestima de los muchachos, lo que hace que se sientan deprimidos y desorientados. En este sentido, el especialista cita un estudio presentado por la asociación Mexicanos Primero, en el que se afirma que sólo 13% de los estudiantes que ingresan a primaria en México concluyen una carrera profesional.
Un ejemplo más son las cifras arrojadas durante el proceso de selección de ingreso a las licenciaturas e ingenierías de la UNAM, la universidad pública más grande e importante del país, pues de las casi 115 mil solicitudes recibidas, deja fuera a más de 105 mil estudiantes. Algo similar sucede con el Instituto Politécnico Nacional (IPN), ya que la demanda es de aproximadamente 110 mil jóvenes, pero rechaza a 88 mil 500 aspirantes.
Abunda el experto: “Al analizar esta situación nos preguntamos: ¿Cómo no ha pasado algo más grave en México? ¿A qué le apuestan las autoridades? ¿Piensan que el problema lo resolverá de manera natural la mano invisible del mercado? ¿Cuál es el efecto de tener a 7 millones de jóvenes en esa condición? ¿Qué consecuencias tiene? ¿Qué hacen esos muchachos? ¿Qué pasa con ellos? ¿Cómo se comportan? ¿A qué se dedican? ¿Qué piensan hacer? ¿Por qué no protestan? ¿Por qué no toman las calles?”.
Colofón
En realidad conocemos muy poco el fenómeno de los Ninis. Se trata de segmento muy especial y sensible de la sociedad, pero todavía no tenemos estudios serios que nos permitan saber realmente lo que está pasando con ellos y cómo procesan sus conflictos, puntualiza el politólogo, quien reconoce que muchos de estos muchachos viven de la solidaridad familiar, retardan la salida de casa y postergan planes de matrimonio e independencia económica. Algunos, por supuesto, no tiene otra opción más que la migración hacia Estados Unidos.

“Otros más deciden formarse en institutos de muy baja calidad. Es por ello que optan por estudiar idiomas o computación en academias de muy bajo costo, que dan algunas facilidades y que han crecido sin control. Evidentemente, muchos se incorporan al mercado laboral informal, y otros más se inscriben en las filas de la delincuencia organizada y el narcotráfico. Este sector de la población, como lo dijo el Dr. Narro Robles, constituye la bolsa de trabajo del narcotráfico”, concluye.