TABACO
LA DROGA SILENCIOSA
QUE ASESINA EN MASA
La nicotina y el alquitrán matan
millones de personas a diario. El humo perjudica también a los no fumadores.
---Eso sig…
ni… fi… ca --- digo titubeando ---, ¡que Rodrigo ya había visto antes a
Jennifer en el orfanato! --- mi prima asiente un poco ---, que tipo tan
mentiroso. Ayer dijo que no la conocía.
Itzel se limpia las
lágrimas y confiesa:
--- Rodrigo y yo
terminamos mal. ¡Nos peleamos horrible!
Mira la marca de su
muñeca y trata de tocarla. Es obvio que le duele.
--- Deberías ver a
un médico --- le aconsejo ---, esa herida esta fea. Ya debería haber cerrado.
--- Si --- concede
---, tal vez tengas razón. Pero hay otras cosas que me preocupan más. Rodrigo
se dio cuenta como quiero a mis niñas. En especial a Jennifer. Quizá la
perjudico sabiendo que de esa forma me lastimaría a mí también.
Siento que mi
corazón palpita de forma acelerada. Las cosas se están complicando cada vez más.
Mi prima se soba la muñeca con suavidad.
--- ¿Te duele?
--- Sí.
--- ¿Cómo te quemo?
--- Fuimos a una
fiesta de parejas --- explica con la vista fija en un punto ---. Todos bebieron
tequila y fumaron muchos cigarrillos. Quisieron enseñarme a jugar cartas. Aunque
había otras mujeres, yo estaba muy incómoda. No me sentía bien en ese lugar.
Insistieron tanto que bebí una margarita. Como no estoy acostumbrada a tomar
alcohol, me emborrache. De pronto, dejaron de apostar dinero e inventaron un
juego nuevo. Escribieron varios castigos en tarjetitas que pusieron sobre la
mesa. Se reían y murmuraban. Según ellos, una de las tarjetas contenía la
“sentencia máxima”. Comenzamos a jugar. A los perdedores les salían castigos
bastante fuertes como quitarse algunas prendas de vestir o dar besos y
cachetadas a diferentes personas, pero cuando a la muchacha que estaba junto a
mi le toco “la sentencia máxima”, todos se pusieron felices. Hubo gritos y
carcajadas. Al calor de las copas y del humo, ella tuvo que obedecer…
Itzel se detiene en
su relato. La animo a seguir.
--- ¿Qué decía la
tarjeta?
Baja la voz y
voltea cerciorándose de que nadie más la escuche.
--- “Desnúdate por
completo o haz la prueba de fuego”.
--- ¿Cómo?
--- Tal cual. La
mujer estaba muy tomada, así que opto por quitarse la ropa. Solo le permitieron
quedarse con los calzoncillos. Yo quise salirme del juego, pero no me dejaron.
La que me obligo a permanecer casi a gritos, fue la muchacha recién desnudada.
Quería a toda costa que alguien más sufriera la pena máxima. Acordamos en jugar
solo cinco rondas más. Volvieron a meter la “sentencia de muerte” en el paquete
de cartas y las revolvieron. Me libre de perder en las primeras cuatro, pero a
la quinta, tuve la carta más baja. Tome la tarjeta y ahí estaba otra vez. Ya te
imaginaras --- levanta su brazo lastimado ---, esta era la prueba de fuego…
Lo comprendo todo.
Mi prima no acepto desnudarse, pero la obligaron a quemar su piel con un
cigarrillo encendido.
--- ¿Lo hiciste tu
sola? --- pregunto.
--- No. Me
detuvieron entre varios y la chava sin ropa lo hizo… Hubo muchas risas y aplausos. Yo no podía
creer que Rodrigo hubiese visto todo sin defenderme. Cuando subimos al coche,
yo estaba llorando. Sentía mucho dolor en el brazo. Él quiso consolarme. Se acercó
a mí y me beso. Trate de apartarlo, pero me agarro con mucha fuerza y siguió
besándome. Olía a tabaco. Sabía a tabaco. Era como si me hubieran obligado a
chupar un cenicero.
Trago saliva. La
perrita french poodle entra al estudio. La acaricio, como tratando de no darle
importancia a cuanto acabo de escuchar, pero lo cierto es que estoy temblando.
--- ¿Qué le dijiste
a Rodrigo, después de que te beso a la fuerza?
Itzel tiene la
mirada cristalizada por el coraje al recordar.
--- Lo amenace con
denunciarlo en la policía porque el ocasiono que sus amigos me quemaran el
brazo. Le dije que era un poco hombre. Me contesto: “cálmate, tomate esta
pastilla, es una medicina para el dolor de la quemadura; te sentirás mejor”.
Ahora pienso que tal vez el muy desgraciado quería drogarme. Le avente la
pastilla a la cara y salí de su auto. Casi me atropellan. Subí a un taxi y
nunca más volví a verlo, hasta ayer en la noche.
--- ¿Lo
denunciaste?
--- No.
--- ¿Al menos le
platicaste a tu mama?
--- No, Felipe. Tú
eres el primero que lo sabe. Supongo que me paso como a las mujeres que sufren
abuso o tienen problemas con los hombres. Se sienten culpables, sucias y solo
decena olvidar lo que ocurrió. Por eso callan.
Itzel toma el
cuadrito de tela adhesiva dispuesta a cubrirse la llaga de su muñeca.
--- Espera --- le
digo ---, déjame verla.
Me la muestra.
Tiene como un agujero en carne viva.
--- No está nada
bien. Esto se te puede infectar. Prométeme que vas a decirle a tu mama o a un
médico…
Sonríe cariñosa y
me abraza.
--- Si, primo, te
lo prometo.
Luego vuelve al
proceso de ponerse la gasa.
--- Ahora entiendo
--- le digo, pensativo ---, por que no soportas el cigarro.
--- ¡Su simple olor
me da asco, Felipe! Además, es una droga muy dañina.
--- Bueno ---
objeto ---. El cigarro se considera una droga “blanda”. No es como el GHB y
todas esas a las que les llaman “duran”.
--- ¿Quién te dijo
eso?
--- Lo leí.
--- ¿Pues es una
tontería! No existen drogas duras y blandas.
Existen drogas.
Punto. La televisión hace publicidad para que digamos “no” a las drogas y los
adultos se preocupan porque la juventud no se drogue, pero hablando claro, en
el mundo mueren más personas debido a las consecuencias del alcohol y del
tabaco, que por el uso de todas las drogas ilegales juntas.
--- ¿Entonces el
tabaco si es una droga?
--- Por supuesto.
Revisa la definición --- mueve el mouse y abre varias páginas; después de unos
segundos dice ---, aquí esta. Se le llama droga a toda sustancia no
alimenticia, que produce tolerancia y a veces adicción, cuyas moléculas viajan
en forma directa al cerebro y actúan sobre el alterando las sensaciones físicas
o psicológicas y modificando el comportamiento de la persona.
--- La doctora de
la Secretaria de Salud dio una definición parecida.
--- Bueno, pues el
tabaco cumple con todos los requisitos.
Acabo de leerlo.
Mira. Es una droga adictiva. Produce dependencia física y psicológica con
rapidez. De hecho, aquí dice que la Nicotina pura es un veneno muy potente. Si
tomaras unas cuantas gotas de Nicotina morirías en minutos --- señala su
monitor y mueve la pantalla para seguir el tema ---. En el humo del cigarro,
las partículas de Nicotina se disuelven con la saliva de la boca y pasan a la
sangre; al llegar al cerebro irritan las neuronas y mejoran los niveles de
atención; al mismo tiempo disminuyen la rigidez muscular. Los efectos parecen
muy agradables: de alerta y relajación a la vez. Pero el fumador no se da
cuenta de que sus dientes se vuelven amarillos, su piel se reseca, su boca
adquiere un profundo olor acre y su condición física disminuye, porque el
tabaco lesiona los pulmones, además de ocasionar cáncer y enfermedades del
corazón.
--- Pero yo conozco
personas mayores que han fumado toda la vida y se encuentran sanas --- protesto
---. También he oído que el humo de las ciudades contaminadas es más dañino que
el humo de los cigarrillos.
--- Las dos cosas
son mentira, Felipe. Todos conocemos adultos fumadores, ¡pero analízalos bien!
Ve como les cuesta trabajo respirar, escúchalos toser, observa que casi no se
mueven y son incapaces de hacer el más mínimo ejercicio; mira sus dientes,
acércate a oler la fetidez de su boca. Si pudieras echar un vistazo a sus
pulmones te asuntarías. Aunque has sobrevivido a un hábito nocivo, no merecen
honores por ello. ¡Todo lo contrario! Cuando alguien enciende un cigarro para
fumarlo, solo presume debilidad de carácter. Un fumador puede triunfar en
muchas áreas, pero el cigarro en su boca habla de fracaso en otras. Quizá esa
persona tenga la suerte de llegar a ser anciana, pero es más posible que pase a
formar parte de las estadísticas de quienes mueren cada día por enfisema
pulmonar o cáncer. Mira lo que dice aquí. Me muestra la pantalla de su
computadora.
Acerco mi silla
para leer.
--- Los estudios
epidemiológicos señalan que el tabaco es causante del 30% de todos los canceres
diagnosticados, frente a un 2% producido por la contaminación ambiental, así
que es tonto decir que el humo de las fábricas y autos causa más daño. Cuando
el cigarro se deja consumir en el cenicero, el humo que sale de él es incluso
más dañino, pues tiene mayor concentración de cancerígenos. Al fumar delante de
otras personas se les está convirtiendo en fumadores pasivos obligándolos a
respirar un aire contaminado. Los fumadores pasivos también pueden padecer
problemas respiratorios. Fumar durante el embarazo pude dañar al bebe. Para
fumar Marihuana o Crack se necesita, por fuerza, aprender a fumar tabaco,
primero.
--- Entonces ---
reflexiono ---, papá también fumó cigarros.
--- Seguramente.
Suena el teléfono
de la casa.
Mi prima no
contesta de forma inmediata. Respira con calma y levanta el aparato.
--- Si, tío --- se
para de un brinco y me hace señas con una mano para indicarme que es mi papá
---. Felipe está aquí conmigo --- asiente varias veces ---. ¿Cómo sigue
Jennifer? --- mi prima escucha con atención: me acerco a ella ---. Vamos para
allá.
Cuelga el aparato y
me mira, preocupada.
--- Acaban de
llegar a tu casa. Dicen que necesitan hablar con nosotros.
--- ¿No te
comento…?
--- Nada.
Doblo las tres
hojas con la información que imprimió sobre las drogas y me las echo a la
bolsa. Ella apaga la computadora con rapidez sin decir nada más, corre a
cambiarse y sale de la casa.
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